jueves, 27 de julio de 2017

SUMMER DESIGN FICTION: RECALLING THE MUDIC EXPERIENCE





Recientemente ha finalizado el Máster Universitario en Diseño y Comunicación que he cursado en Elisava como paso imprescindible para iniciar la senda del doctorado. Ha sido una situación curiosa y enormemente gratificante poder compartir curso con compañeros, jóvenes ellas y ellos, de diferentes países latinoamericanos y de otras ciudades de España y de Europa. Volver a estar “al otro lado” de la clase también ha sido una experiencia valiosa para ver cómo se siente y que pasa en el rol del estudiante. Experimentarlo es lo mejor para conocer la realidad.

También hemos conocido a unos profesores que nos han aportado conocimientos y puntos de vista sobre la situación del diseño y de la sociedad que, desde el ámbito académico, está bien analizar. Entre ellos quiero destacar a Carla Boserman y Efrain Foglia que, desde la asignatura FUTURNET, hemos trabajado desde el ámbito de design fiction para proponer escenarios de futuro mediatizados por Internet.
Las imágenes de este comentario hacen referencia a un ejercicio mío, de la mencionada asignatura, donde imaginaba una noticia del futuro que hacía referencia a la situación verosímil de la desmaterialización de los objetos de uso en clave de Diseño Especulativo.


Buen Verano!

sábado, 1 de julio de 2017

Una velada con Michael Webb de ARCHIGRAM




La conferencia inaugural de la FADFEST de este año 2017 contó con la presencia de Michael Webb uno de los fundadores, en los años 60', del mítico grupo de arquitectos ARCHIGRAM. Fué una conferencia emotiva, algo caótica por la personalidad del ponente, pero muy sugerente.


Los temas y las preocupaciones de ARCHIGRAM: la ciudad móvil, el aprovechamiento de los espacios para que estén 24h en uso (hablando de oficinas y otros equipamientos), el automóvil, el transporte urbano y su integración los edificios, los recursos y los servicios, etc... Las preguntas eternas: ¿es necesario construir más? ¿no será mejor aprovechar lo que ya tenemos?.

A sus 80 años Michael Webb demuestra una vitalidad envidiable y un humor y una flema típica inglesa. En resumen: una velada entrañable evocadora de los sesenta, en el marco sugerente de una piscina desecada temporalmente y una cubierta de construcción efímera.







 

lunes, 19 de junio de 2017

Design Attitudes: midiendo la creatividad en colores


El pasado sábado 10 de Junio en Elisava tuvo lugar el evento Design Attitudes, organizado por Elisava Alumni y dirigido por Laura Clèries Directora de Elisava Research. Se contó con las ponencias de exalumnos que ocupan cargos relevantes en empresas como SEAT, LEGO, MEDIAPRO, ÀNIMA, etc.. y se realizó el experimento de medir la actitud o actitudes que tenemos cada uno de nosotros como diseñadores de entre estas cuatro: Conscious, Engaged, Rebel, Resilient.  

En el camino de decodificar la creatividad, este experimento muy bien resuelto con el dispositivo lumínico, ha sido un primer paso realizado en directo y en un evento multitudinario. En mi caso salió un perfil bastante equilibrado con un poco de todo, a pesar de que, de buen inicio, yo me había postulado como Conscious (!?¡). Ha sido curioso participar en este evento!

viernes, 6 de enero de 2017

Reivindicación de lo No Diseñado o hacia un Diseño Imperceptible


(Explorando otras realidades por si la que vemos no nos convence. Con el regalo de unas gafas de realidad virtual)

Empieza el año y leo un artículo de Xavier Monteys en El País del jueves 5 “Churros necesarios” donde reivindica los puestos de churros ambulantes, las tradicionales churrerías equipadas en una furgoneta o remolque. Instalaciones por las cuales, como dice el autor, nunca ha pasado el diseño, tipografías de western, con nombres populares, colores básicos, luces fluorescentes, una nota de chillona vulgaridad urbana, etc…Constituye una interesante reflexión sobre la saturación y la artificialidad a que puede llegar en nuestro contexto un uso excesivo de fórmulas de diseño aplicadas desmesuradamente a todo lo cotidiano. Es cierto que cuando vemos, por ejemplo, según que tipos de establecimientos, formalmente muy intervenidos, nos suenan a postizos y que encima serán caros. Cuando la intervención del diseño se vuelve demasiado perceptible se sobreactua y el resultado pierde espontaneidad. Y esto puede conducir a la saturación y al rechazo. Sería una verdadera lástima perder todo lo andado solamente por hastío.
Hace unos años para la revista Barcelona Metrópolis Mediterránea escribí un artículo titulado ¿Demasiado diseño? donde intentaba incidir sobre este tema separando lo que vemos aparente, entre lo diseñado, frente a lo que queda por resolver y, lo segundo es una lista muy grande. Quedan muchísimas cosas para diseñar bien y muchísimas más que aún tienen que llegar. Muchas de estas cosas están relacionadas con la interacción cotidiana con los dispositivos, incluso en los tan comunes como los teléfonos móviles (si, si, que parecen sencillos de usar pero siguen siendo un gran problema para muchas generaciones de usuarios..), los controles de los ascensores, de los termostatos domésticos, dispositivos electrónicos de los automóviles, de electrodomésticos, etc.

La formalización aparente y banal no es diseño o, en cualquier caso, no es buen diseño. La empatía que nos producen algunos objetos cuya utilidad y cuya estética ha conseguido un buen equilibrio es entrañable. Recientemente han otorgado la Medalla al Mérito de las Bellas Artes a Miguel Milá, diseñador de la lámpara TMC, un buen ejemplo de esto a lo que me estoy refiriendo. Desde aquí mi enhorabuena!. Y esta es la fórmula antigua con la que estudiamos muchas generaciones de diseñadores. Ahora que todo es tecnología y nuevas formas de negocio, que no está muy de moda hablar de estética de la forma y de funciones sencillas e ingeniosas, puede ser un buen momento de revisar los fundamentos clásicos del diseño para iniciar el año.